24 jul 2009

Sanción ejemplar

A través de un colega me ha llegado una noticia impresionante del mundo del rugby y las sanciones que en este deporte se aplican. La pongo tal y como me la han mandado. El artículo es de Ricardo Grande.

Un jugador de rugby no jugará durante un año por fingir que sangraba

Los Harlequins, multados con 250.000 euros por la trampa del jugador de rugby Tom Williams que ha sido apartado de su equipo un año. RICARDO GRANDE 23/07/2009 Las cámaras pudieron captar como Tom Williams, de los Harlequins, sangraba abundantemente por la boca. Su lesión era la única posibilidad de que su compañero Nick Evans volviera al campo. No puede haber sangre en el terreno de juego. La European Rugby Club, el organismo que gobierna el rugby europeo, investigó la extraña herida, que no dejó huella en la boca de Williams, y le ha penalizado con un año de sanción, según publicó ayer The Guardian . El resto de acusados, el médico y el fisioterapeuta del equipo, han sido exculpados. Eso sí, el club tendrá que pagar 250.000 euros. El castigo, bastante duro, no ha tenido una respuesta unánime en el mundo del rugby, un deporte en el que se lleva mal la farsa. Ocurrió el 12 de abril, quedaban cinco minutos para que terminara el partido de cuartos de final de la Heineken Cup, la máxima competición europea. Desde que Williams salió del campo, la sospecha planeó sobre él y su equipo. El hecho de que el jugador guiñara un ojo a su relevo no ayudaba a ponerse de su lado. El secretario general de la Federación Española de Rugby, José Manuel Moreno, califica el hecho como "muy inusual, porque en este deporte suele ocurrir más bien lo contrario, que se oculte la sangre o se disimule una lesión, todo para evitar que te cambien". El rugby es, como se suele decir, "un deporte de villanos practicado por caballeros" en el que rige un código de honor no escrito pero muy riguroso. "El rugby exige contacto, el juego limpio es esencial porque hay muchas ocasiones de herir al contrario. No se tolera que a un contrario se le hiera intencionadamente, sobre todo cuando está en alguna situación especialmente vulnerable". Moreno tiene claro que este tipo de acciones debe sancionarse duramente, pero no entra a valorar si el castigo de un año es excesivo. "Parece un cambio táctico, por eso también se sanciona al club. Harlequins perdía 5 a 6, debieron de pensar que lo mejor era sacar de nuevo a su apertura titular, una figura clave." The Guardian recoge declaraciones de la Federación Internacional, que ha aplaudido la decisión del organismo europeo, y de la Asociación Profesional del Rugby, que cree que un año sin jugar es "desproporcionado". Harlequins espera ahora a que el proceso judicial finalice. "Sería irresponsable hacer declaraciones ahora", explican desde la entidad al diario británico. Si nada cambia, Tom Williams, de 25 años, tendrá que esperar hasta julio del año que viene para poder competir. "El fair play es imprescindible, y lo habitual. Claro, siempre está el garbanzo negro, por eso las sanciones son tan duras... Si te pillan, hay que pagarlo", opina Moreno.


Tom Williams

1 comentario:

Maverick dijo...

Otros "deportes" deberían tomar ejemplo. Así acabarían muchas pantomimas y obras teatrales representadas por millonarios.
Ante todo hay que jugar con honor.